Agentes implicados:
- Trabajadores, dirección de la empresa y empresas operadoras de los servicios.
Medios necesarios:
- Se trata de aplicar bien tanto al transporte regular como al discrecional un servicio exprés que conecte la empresa directamente con un intercambiador o estación de transporte, sin efectuar paradas intermedias y eligiendo los itinerarios más rápidos.
- Es conveniente que los itinerarios recorran espacios de poco tráfico o que tengan prioridad respecto a otros medios.
Intermodalidad:
- Deberá conectar con los intercambiadores y estaciones de forma coordinada con los servicios planteados de tal forma que se eviten los períodos de espera.
- Se podría negociar entre la dirección de la empresa y las operadoras de transporte masivo (tren, metro, tranvía o autobuses) la adaptación de sus servicios a los horarios de entrada/salida de la empresa.
Beneficios:
- Ahorro de tiempo de transporte.
- Ahorro económico.
- Reducción de contaminantes.
- Disminución del volumen de vehículos en circulación.
- Reducción del riesgo de accidente in itínere.
- Los trabajadores llegan a su trabajo descansados y sin estrés.
- Es una opción viable para trabajadores que no conducen.
- Reduce la necesidad de crear más espacio para el estacionamiento.
Financiación:
- Deberá ser financiado por la empresa; aunque en los casos en que se trate de líneas regulares de transporte público, serán los operadores de transporte los que se hagan cargo de los costes del servicio.
- En algunas ocasiones se ha propuesto que las lanzaderas de empresa se convirtieran en servicios públicos de transporte, momento en el que el coste es asumido por el operador que lo ofrece de forma gratuita. La ventaja es que captará un mayor número de viajeros; este es el caso del Ferrocarril de la Generalitat de Catalunya en Can Sant Joan.