La edición publicada recientemente de esta iniciativa de prevención del cáncer recoge la necesidad de mantener el tabaco alejado de los lugares de trabajo y respetar las instrucciones de salud y seguridad para eliminar o controlar las exposiciones a sustancias cancerígenas en el trabajo.
El Código Europeo contra el Cáncer es una iniciativa de la Comisión Europea y de la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer para informar a la ciudadanía acerca de las acciones que pueden tomar para sí mismos o sus familias con el objetivo de reducir el riesgo de cáncer. Su nueva versión, que ya alcanza la cuarta edición, consta de doce recomendaciones que la mayoría de la personas pueden seguir de manera simple y entre ellas se incluyen dos que hacen referencia explícita a los lugares de trabajo.
En concreto se recomienda apoyar la políticas para eliminar el tabaco en los lugares de trabajo (algo que ya contempla la legislación española) y protegerse de las sustancias cancerígenas en el trabajo siguiendo las instrucciones de salud y seguridad en el trabajo. También hay otras recomendaciones, como las de tomar medidas para reducir los niveles de radón en las viviendas o reducir la exposición a la radiación solar, que tienen aplicación en el ámbito laboral.
La cuarta edición del Código, que vio la luz por primera vez en 1987, se ha preparado entre 2012 y 2013 por especialistas en cáncer, científicos y otros expertos de toda la Unión Europea en un proyecto coordinado por la Agencia Internacional para la Investigación sobre el Cáncer, financiado por el Programa de Salud de la UE. Los expertos han contribuido durante un período de dos años a un esfuerzo de colaboración multidisciplinar en la que se recogió y revisó en grupos de trabajo las pruebas pertinentes.