La sociedad demanda cada vez más un cambio del modelo de movilidad, requiriendo modos alternativos al uso abusivo del vehículo privado motorizado. Teniendo en cuenta que la movilidad realizada por motivos laborales -el ir y venir del lugar trabajo-, es uno de los principales motivos por el que nos desplazamos y que es en este tipo de viajes cuando más se utiliza el coche, es evidente que uno de los objetivos prioritarios para alcanzar el cambio de modelo debe ser promover la movilidad sostenible y segura en los desplazamientos para acudir al trabajo.
El uso masivo y excesivo del coche para estos desplazamientos provoca una serie de graves impactos que perjudican a los trabajadores y las trabajadoras, pero también a la ciudadanía en general y, sin duda, acaban por afectar a la competitividad del tejido productivo.
Los impactos en forma de externalidades negativas son, básicamente, la elevada tasa de accidentalidad que conlleva que los accidentes in itinere se hayan convertido en una importante causa de accidentes laborales; la exclusión social, no toda la población laboral tiene acceso al coche provocando disfunciones en el mercado laboral; la dispersión de los centros de trabajo y la creciente congestión del tráfico hacen aumentar el tiempo dedicado a los desplazamientos en detrimento de la conciliación de la vida laboral y familiar; se incrementan los costes directos por el uso y tenencia del automóvil que deben soportar las economías familiares; las emisiones de gases y compuestos contaminantes, principalmente el dióxido de nitrógeno y las micro partículas, que perjudican la salud y afectan a los problemas relacionados con los sistemas cardiovasculares y respiratorios; e, igualmente, el tráfico rodado es uno de los máximos responsables de las emisiones de CO2 a la atmósfera provocando el cambio climático.
Precisamente por esta razón tenemos la necesidad de contar con herramientas que ilustren y faciliten la transición hacia este nuevo modelo de movilidad y, por ello, la idoneidad de editar esta Guía práctica de apoyo a la acción sindical, en la cual se exponen los procedimientos y la metodología para actuar con el fin de transformar el modo cotidiano en el que se desplazan miles y miles de trabajadores y trabajadoras a sus centros de trabajo.
Sin duda esta tarea de promover el cambio modal debe ser impulsado por aquellos que tenemos la responsabilidad de representar y en consecuencia de defender los derechos laborales de los trabajadores y trabajadoras, lo cual incluye sin duda, el derecho a la accesibilidad de manera sostenible y segura.
Por este motivo, desde ISTAS, hemos elaborado dos guías sobre movilidad que pretenden ser un instrumento útil para el trabajo cotidiano de los sindicalistas, ofreciendo las claves para que nuestras iniciativas avancen por el buen camino. La primera de ellas, La guía práctica de apoyo a la acción sindical incluye nuestras propuestas de gestión y planificación, en materia de movilidad, que debemos divulgar y dar a conocer entre todo el colectivo de trabajadores y trabajadoras, los que, en definitiva, serán los verdaderos protagonistas del cambio de modelo. En la segunda, La movilidad + sostenible, hemos reunido 35 experiencias que puedan servir de ejemplo de cómo intervenir, a través de la acción sindical, dentro de las empresas y en el entorno donde éstas se localizan (polígono industrial, parque de actividades, etc.) para alcanzar la meta que nos hemos propuesto de romper con la hegemonía del coche para llegar al puesto de trabajo.
En definitiva, se trata de provocar la irrupción de un nuevo modelo de movilidad donde se imponga una movilidad social, ambiental y económicamente sostenible y en la que los trabajadores y las trabajadoras sean agentes activos necesarios para impulsar este cambio que tantos beneficios les va a reportar.
Fernando Rodrigo Cencillo
Director de ISTAS