Fallece la víctima 27 por amianto en Euskadi en 2012

Alfredo Fernández falleció ayer en Rentería a los 68 años de edad, víctima de un cáncer provocado por el amianto. Esta nueva víctima se convierte en la número 27 en lo que va de año en Euskadi a causa de haber trabajado con amianto.

Alfredo inhaló fibras de amianto tras haber estado expuesto durante los años 70 en la empresa Productos Aislantes SA (PAISA) de Rentería, tomó contacto con el amianto siendo menor de edad, (a pesar de la legislación que prohibía expresamente la exposición laboral con el amianto a menores de edad) limpiando con la espátula, siendo pinché, con absoluto desconocimiento del riesgo cancerígeno, que suponía el ambiente pulvígeno, que se producía en el proceso de mezclar productos utilizados en la fabricación de baterías para los automóviles.

Afectado por un adenocarcinoma de pulmón, donde se visualizaban los engrosamientos y nódulos pleurales (lesión típica y específica del amianto), los médicos se negaron a comunicar “sospecha”. Observando las lesiones pleurales, preferían ocultar su origen, con la excusa del hábito tabáquico.

Hace unos meses, CCOO logra el reconocimiento del origen profesional de la enfermedad, mejorando la pensión con la Incapacidad Absoluta. En la actualidad, había puesto una demanda reclamando daños, contra ERCROS SA, propietaria de PAISA a la hora de su cierre.

Esta nueva muerte, la 27 durante el 2012, sitúa la importancia de la Vigilancia Sanitaria específica con el Protocolo del amianto, para la detección precoz de la enfermedad, incluyendo en dicho Plan, a las decenas de miles de trabajadores que estuvieron expuestos, especialmente, para quienes trabajaron en PAISA de Errenteria, donde ha quedado demostrada la gravedad de la exposición al amianto con varias muertes.  

Jesús Uzkudun, responsable de Salud laboral de CCOO de Euskadi, ha realizado un llamamiento a los profesionales sanitarios de neumología y oncología, para que comuniquen “sospecha de enfermedad profesional” inmediatamente tras la detección de “placas y engrosamientos pleurales” en los enfermos. Jesús Uzkudun ha asegurado que está en juego la mejora de las prestaciones económicas del enfermo y familias, así como que OSAKIDETZA tenga que correr  con gastos sanitarios que corresponden a las Mutuas.

 

A juicio de Jesús Uzkudun, estas muertes prematuras, son consecuencia del olvido por las empresas de la necesaria prevención de las múltiples sustancias cancerígenas. Incumplimientos que antes o después, resultaran muy caras, al verse obligadas a reparar con cuantiosas indemnizaciones, ha concluido