La UE debe apostar por un acuerdo ambicioso de reducción de emisiones

Los sindicatos europeos piden a la UE que apueste por un acuerdo ambicioso de reducción de emisiones

Madrid, 10 de diciembre

La Confederación Europea de Sindicatos (CES) ha pedido al Consejo Europeo que el paquete de medidas de energía y lucha contra el cambio climático que debatirá el 11 y 12 de diciembre tenga un objetivo ambicioso de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero. Dicho paquete debería contemplar además medidas para controlar los posibles efectos que el tránsito hacia una economía baja en carbono podría tener para los trabajadores de algunos sectores.

Este acuerdo, según la CES, debe situar a Europa en la senda de una economía eficiente desde el punto de vista energético, con bajas emisiones de CO2 y que proporcione trabajos cualificados y de calidad en un modelo productivo que respete el medio ambiente.
"La transición hacia una economía baja en carbono no sucederá sin problemas, especialmente para los trabajadores de los sectores que consumen grandes cantidades de combustibles fósiles. Los sindicatos europeos rechazan que el coste de esta transición recaiga en los empleos, sobre todo en los más vulnerables", ha señalado el secretario confederal de Medio Ambiente de la CES, Joël Decaillon.

Tanto el acuerdo internacional como los objetivos del paquete europeo han de ser ambiciosos y que no se pueden reducir ni condicionar con la excusa de la crisis económica. Ésta ha de servir para impulsar el necesario cambio de modelo productivo y energético, que debe ser una oportunidad para la creación de empleos en los sectores emergentes.
Es imprescindible que todas las instituciones impulsen una transición justa que ampare y proteja a los trabajadores de los sectores que puedan verse afectados negativamente. Ante las negociaciones internacionales para un nuevo acuerdo de reducción de emisiones que se están celebrando en Poznan (Polonia), los gobiernos europeos deben buscar fórmulas para que las industrias contaminantes de los países emergentes competidores puedan llegarse a incluir en el régimen de comercio de derechos de emisión y sostener con ello la competitividad de la industria europea.

Los sindicatos esperan que los gobiernos europeos impulsen todas estas medidas y compromisos para salvar el clima salvaguardando también los derechos laborales y el empleo.