La mitad de los trabajadores dedicados a la prevención y extinción de incendios, con contrato temporal

Hasta el 26 de agosto de 2009 se han registrado en nuestro país un total de 10.665 incendios que han calcinado más de 85.000 hectáreas de superficie forestal, más del doble que la superficie que ardió el año pasado.

Se han registrado además 25 grandes incendios forestales (de más de 500 hectáreas), frente a los 5 de 2008 y los 19 de media del decenio 1997-2008.

El número de víctimas mortales a causa de los incendios forestales se eleva ya a catorce personas. Nueve de ellas eran profesionales de la extinción, dos tripulantes de aeronaves, dos retenes de maquinaria y cinco bomberos y cinco eran personas ajenas al operativo.

Este año cerca de 56.000 trabajadores se dedicarán a la extinción de incendios. De ellos, casi la mitad tiene un contrato temporal o fijo-discontinuo. En la mayoría de los casos los empleadores son las empresas públicas, que no están garantizando la estabilidad laboral adecuada, la formación o el equipamiento correcto para los trabajadores. De cada cuatro trabajadores, tres se dedican a la extinción y sólo una cuarta parte a la prevención. Cada trabajador debe cubrir una media de 748 hectáreas.

Son algunos de los datos del informe Evolución de los incendios forestales en España y de la situación de los trabajadores de prevención y extinción 2009, presentado hoy en rueda de prensa. El informe, elaborado por el Instituto Sindical de Trabajo, Ambiente y Salud (ISTAS) de CCOO, analiza las causas que originan los incendios y los medios económicos y humanos que se emplean en la extinción.

En 2008 el número de siniestros fue el menor del decenio 1998-2007, excepto el año 2007 en el cual se registraron 678 siniestros menos que en el mismo periodo en el 2008. Sin embargo las cifras de superficie forestal afectada son las menores del decenio con una diferencia respecto a la media altamente significativa (ardieron 40.977,46 hectáreas de superficie forestal frente a las 131.774,54 del decenio).

Pese a que en 2008 se registraron menos incendios que la media del decenio 1998-2007, la cifra de siniestros superó la de 2007. Sin embargo, en 2009 se ha superado ya el número de incendios y la superficie calcinada para el mismo periodo del año anterior y de media del decenio citado.

La Comunidad de Madrid, Comunidad Valenciana e Islas Baleares son las que más invierten en la lucha contra los incendios forestales según su superficie forestal. En los mismos términos, las comunidades que menos invierten son Aragón, Extremadura y Asturias. La media de inversión autonómica en la lucha contra los incendios forestales es de 34,57 euros por hectárea forestal. La suma de las inversiones de este año para combatir el fuego es de 951 millones de euros.

Los incendios forestales no desaparecerán de nuestro país hasta que no lo hagan las principales causas estructurales que los generan. El abandono del campo y el consiguiente aumento de la biomasa, unidos a la alta intencionalidad y las malas prácticas agrarias hacen que nuestros montes sean en la actualidad un auténtico polvorín.

El desconocimiento de la causa de un 20% de los siniestros en nuestro país indica que los avances que se han producido en materia de investigación -principalmente en las fiscalías de medio ambiente-, aunque muy importantes, son insuficientes. Se siguen documentando problemas de coordinación entre distintos cuerpos de seguridad, o de inhibición o infrautilización de personal con la consideración de policía judicial, como son los agentes forestales, mientras que empresas privadas van internándose en labores de investigación en algunas comunidades autónomas. Siguen faltando brigadas de investigación (BIIF) en algunas comunidades autónomas, y la formación en materia de investigación es heterogénea, y a veces insuficiente.