La energía abundante y barata es un regalo envenado

La crisis ecológica global requiere soluciones globales que pasan por un cambio en el modelo de vida, nos advierte Jorge Riechmann. Autor prolífico, poeta, profesor de Filosofía Moral y colaborador de ISTAS, Riechmann insiste en su último ensayo (La habitación de Pascal, Libros de la Catarata, 2009) en la idea de autocontención y suficiencia como vía para profundizar en una democracia que tenga en cuenta a la naturaleza y "rescatar" así a la especie humana. La ciencia y la tecnología, por sí mismas, no bastan.

Reproducimos uno de los capítulos del libro, en el que aborda el dilema energético. A largo plazo, no está claro que pueda mantenerse el sobreconsumo energético actual con fuentes alternativas. Y no digamos extenderlo igualitariamente a ocho o nueve mil millones de personas... La especie humana sin duda puede volver a vivir solamente del sol, como ya lo hizo durante milenios; pero ¿con un nivel de población tan elevado? ¿Con una economía en permanente expansión material? ¿Con esta "globalización", división internacional del trabajo y explosión del transporte mundial --impulsado por el petróleo barato?

Pasen y lean.